LA CORRUPCION MUNICIPAL EN COSTA RICA

El problema de corrupción municipal en Costa Rica, no es problema de un partido en particular, tampoco de una coalición determinada. El problema de corrupción municipal es un problema nacional.-
 
Es imperante la necesidad de transparentar la institución de los municipios que emergen como la institución más corrupta entre las organizaciones consideradas por los costarricenses
 
Más de veinte alcaldes, elegidos en las últimas dos elecciones municipales, han sido cuestionados y cesados de sus cargos por delitos de corrupción, tres de ellos guardan prisión (el ex alcalde de Garabito, el alcalde de Talamanca, entre otros).  También hay funcionarios  esperan sentencias de la Sala de Casación (ex alcalde de La Unión, actual alcalde de Aserrí, entre otros).-
 LOS DELITOS
 Compras de terrenos a precios abultados, contratos suculentos por trabajos no realizados, supuestos pagos de sueldos a personas fallecidas y boletas falsas para justificar viáticos, declaraciones juradas falsas y con información alterada, “mordidas” en licitaciones públicas, repartición de propiedades en allegados políticos, tratos con narcotraficantes, son algunas de las irregularidades que se les endosan a estos funcionarios que se sacrifican a “favor de su pueblo”.-
 
No es sorprendente, entonces, que las encuestas señalen que los ciudadanos perciben las municipalidades entre las instituciones más corruptas del país. Más aún, cuando se encuestó a empresarios y ejecutivos sobre hechos de corrupción de los cuales tenían conocimiento, los municipios emergen como la institución más corrupta entre las 15 organizaciones consideradas.-
 
El caso más reciente involucra la relación más que cercana entre el sospechoso de narcotráfico de apellidos Ceciliano y el Alcalde de Golfito Jimmy Cubillo Mora, quien, según la Fiscalía de Narcotráfico, recibiría una buena cantidad de dinero por la concesión de “Isla Segura” en ese cantón puntarenense.-
 
Por otro lado el reciente arresto del Alcalde de Talamanca, a quien la Fiscalía de ese puerto del atlántico le endosa una malversación de fondos municipales superior a los trescientos millones de colones.-
 
Esto para citar solo dos casos, ambos en investigación, sin nombrar aquellos donde ya existe sentencia, como es la condena del actual alcalde de Aserrí, quien según el Tribunal Penal recibió dinero de la empresa EBI, que vendría a ser una “dadiva” por un favor concedido.-
 
 PROPUESTAS DEFINIDAS
CÓMO MEJORAR LOS CONTROLES?
 
Las aristas del caso incluyen fuertes polémicas públicas entre líderes políticos locales y alguna complacencia de funcionarios de la Contraloría General de la Republica y Fiscales del Ministerio Publico, que no actúan contra los hechos de corrupción visibles, permitiendo que los corruptos continúen en sus puestos a pesar de las denuncias e investigaciones.-
 
La filiación política de los alcaldes cuestionados es, en buena medida, proporcional al número de alcaldes de cada partido. El problema de corrupción municipal no es problema de un partido en particular, tampoco de una coalición determinada. El problema de corrupción municipal es un problema nacional.-
 
Sin embargo los dos partidos donde se nota este mal de la corrupción con mejor y mayor claridad, es en los partidos Liberación Nacional y Unidad Socialcristiana.-
 
Esto permite abordarlo con altura de miras y mediante acuerdos amplios, más allá de teorías de desalojo o estrategias para apernarse en el poder. La Contraloría ha hecho una buena labor detectando ciertos tipos de irregularidades, por ejemplo, revisando las rendiciones de cuentas, los cálculos de subvenciones y las declaraciones patrimoniales. Sin embargo, la solución a otros problemas no pasa por Contraloría sino por tener mayores estándares de transparencia. Con mayor transparencia es más fácil detectar actos ilícitos, tanto para la ciudadanía como los medios de comunicación, con lo cual involucrarse en dichos actos se vuelve más riesgoso.
 
Si la comunidad de Talamanca o Golfito hubiera tenido en su página web un organigrama con las funciones que cumplen los directivos del municipio junto a sus declaraciones patrimoniales, cualquier vecino hubiese podido denunciar el conflicto de interés de quienes aprobaban los contratos y licitaciones con las empresas privadas, por ejemplo.-
 
La legislación actual contempla pocas exigencias de acceso a información municipal, peor aún, la poca información que debiera estar disponible muchas veces no lo está, y cuando lo está no es de fácil acceso ya que la persona interesada debe dirigirse a una oficina para solicitarla y por escrito.-
 
Debe abrirse la polémica, si nuestro país necesita una ley sobre «transparencia y acceso a la información», que daría importantes avances, destacando la obligación de que la información municipal esté disponible en la Web de cada municipio.-
 
Debe existir una propuesta que divida los estándares en tres categorías: un piso mínimo que cualquier municipio debiera cumplir (nivel básico), aquellos que requieren un esfuerzo adicional de cumplimiento (nivel intermedio) y aquellos que exigen un nivel más exigente de cumplimiento (nivel avanzado).-
 
La propuesta también debe clasificar, los más de ochenta municipios del país de acuerdo a cuán rápido pueden avanzar hacia el cumplimiento de estos estándares.-
 
Los estándares deberían incluir total transparencia respecto de los ingresos, gastos y quienes participan en las corporaciones municipales, ya que estas corporaciones a veces facilitan la corrupción. También se incluiría la obligatoriedad de publicar informes sobre la adjudicación de las concesiones, de las licitaciones públicas, de las propuestas privadas, de las contrataciones directas de servicios para el municipio y de las contrataciones de personal.-
 
Frecuentemente se argumenta que es más fácil para los ciudadanos fiscalizar a las autoridades locales que a las autoridades del gobierno central, porque nuestra relación con las autoridades locales, y los servicios que dependen de ellas, es más cercana. Este argumento se contradice con el hecho que, en la gran mayoría de los países, la corrupción de los gobiernos locales es mucho mayor que aquella del gobierno central. Costa Rica no es una excepción en esta materia. Transparentar la gestión municipal permitirá a la ciudadanía ejercer mejor su rol fiscalizador. Por eso es importante complementar una agenda, que se centre principalmente en mejorar la gobernanza del gobierno central, con un plan integral que mejore la gestión y reduzca la corrupción en los municipios del país.-
 
 
NO MAS CORRUPCION, NO MAS IMPUNIDAD !!!
 
Msc. MAURICIO ALVARADO DELGADILLO
ABOGADO Y NOTARIO 7532
CELULAR 88 71 98 48 / TELFAX 22 78 11 00
TRES RIOS-CARTAGO/AMERICA CENTRAL-

APATIA Y ABSTENCIONISMO, SERÁ LA CORRUPCIÓN LA CULPABLE

El MSC Mauricio Alvarado Delgadillo, analiza cómo la corrupción puede estar afectando el alto abstencionismo y apatía que se presenta en Costa Rica, con respecto a las elecciones 2010

APATIA  O ABSTENCIONISMO

SERA LA CORRUPCION EL CULPABLE?

Para los que estudiamos la corrupción a nivel comparado, la reciente oleada de escándalos en Costa Rica no representa ninguna sorpresa. Países como Colombia, Guatemala, Perú o México llevan años mostrando niveles de corrupción y de calidad de gobierno más parecidos a los de países autoritarios en vías de desarrollo que a los propios de democracias capitalistas avanzadas. ¿Qué factores separan a estos países, y en particular a Costa Rica, de las democracias libres de corrupción?
Una primera tentación que hay que evitar es la de afirmar que la corrupción está en «nuestra cultura». Se trata de un argumento peligroso e intelectualmente poco satisfactorio, pero que, sin embargo, goza de cierto predicamento en algunos círculos -posiblemente los mismos que afirmaban no hace tanto tiempo que la democracia SOCIALMENTE representativa no tenía espacio en nuestra cultura «católica».  Como un creciente número de estudios está demostrando, la causalidad parece ir en todo caso en la dirección opuesta: los países desarrollan «malas» culturas -o culturas donde predomina la desconfianza social- como consecuencia de unos elevados niveles de corrupción.
Una segunda tentación a evitar es el impulso legalista, con mucho arraigo en Costa Rica, uno de los países latinoamericanos del  mundo con mayor proporción de abogados en sus administraciones. Desde la visión legalista, expuesta la semana pasada, por ejemplo,  en el informe de la Universidad de Costa Rica sobre corrupción local, lo que explicaría la misma en el pais, sería «la falta de regulación», que «permite un margen de discrecionalidad, no siempre acorde con la protección del interés público». Pero, ¿alguien puede de veras creer que la solución a la corrupción local consiste en regular todas y cada una de las actividades de estas administraciones?
Sorprende comparar la actitud de nuestros altos Tribunales con sus equivalentes en los países que de verdad luchan contra la corrupción: en ellos, en lugar de artículos con detallados procedimientos, encontramos simplemente alguna presentación de powerpoint señalando que el objetivo es evitar una «deficiente contabilidad», dejando discreción casi absoluta a los auditores públicos sobre cómo llevar a cabo su labor de fiscalización.
Como la literatura moderna sobre corrupción señala, las causas de la corrupción no hay que buscarlas en una «mala cultura» o en una regulación insuficiente, sino en la politización de las instituciones públicas. Las administraciones más proclives a la corrupción son aquéllas con un mayor número de empleados públicos que deben su cargo a un nombramiento político. Y aquí, el contraste entre Costa Rica y los países europeos con niveles bajos de corrupción que es significativo. En una ciudad europea de 100.000 a 500.000 habitantes puede haber, incluyendo al alcalde, dos o tres personas cuyo sueldo depende de que el partido X gane las elecciones. En Costa Rica, el partido que controla un gobierno local puede nombrar multitud de altos cargos y asesores, y, a la vez, tejer una red de agencias y fundaciones con plena discreción en política de personal. En total, en una ciudad media puede haber cientos de personas cuyos salarios dependen de que el partido X gane las elecciones.  Además de que los políticos “ofrecen” que de llegar al poder, recibirán compensación por su apoyo, ya sea con un bono de vivienda o con empleo, a sabiendas que no existe en muchos casos presupuesto para tal acción.
Esto genera diversos incentivos perversos para la corrupción. Los empleados públicos con un horizonte laboral limitado por la incertidumbre de las próximas elecciones son más propensos a aceptar o a solicitar sobornos a cambio de tratos de favor que los empleados públicos con un contrato estable. En segundo lugar, a diferencia de lo que ocurre en la mayoría del mundo occidental, donde los políticos locales están forzados a tomar decisiones junto a funcionarios que estarían dispuestos a denunciar cualquier sospecha de trato de favor, en Costa Rica toda la cadena de decisión de una política pública está en manos de personas que comparten un objetivo común: ganar las elecciones. Esto hace que se toleren con más facilidad los comportamientos ilícitos, y que, al haber mucho más en juego en las elecciones, las tentaciones para otorgar tratos de favor a cambio de financiación ilegal para el partido, sean también más elevadas, de allí los tratos inclusive con narcotraficantes por ejemplo, el financiamiento a un alcalde en la zona sur de Costa Rica, que por poco llega a la Asamblea Legislativa, de no haber sido por la denuncia valiente de ciudadanos en sus tratos con el narco.  
¿Qué podemos hacer para reducir esta politización? La experiencia de otros países resulta ilustrativa. Por ejemplo, entre finales del siglo XIX y principios del XX muchas ciudades de Estados Unidos presentaban unos niveles de politización y corrupción tan estratosféricos como los reflejados en la película Gangs of New York, donde el gobierno de la ciudad aparece capturado por redes clientelares e incluso criminales. Unos años después, la extensa politización de las administraciones locales -y, de su mano, la corrupción- descendió de forma drástica gracias a reformas institucionales como la sustitución del tipo de gobierno strong-mayor (el tipo de gobierno local que predomina en Costa Rica, en el cual un solo cargo electo, el alcalde y su mayoría de gobierno, acumula mucho poder) por el denominado city-manager. En esta nueva forma de gobierno, los cargos electos retienen la capacidad legislativa, pero el poder ejecutivo pasa a manos de un directivo profesional nombrado por una mayoría cualificada de concejales y por un periodo de tiempo no coincidente con el ciclo electoral, reduciendo así el grado de dependencia política. Puede ser que este modelo no sea el más apropiado para Costa Rica, sin embargo la propuesta admite variantes.
Este tipo de gobierno, o variantes del mismo, ha sido adoptado en las administraciones locales de los países occidentales que presentan menores niveles de corrupción. En ellos, el partido que gana las elecciones tiene las «manos atadas» a la hora de hacer nombramientos, porque existe un directivo profesional que gestiona la organización administrativa, o bien debe llegar a amplios acuerdos con otras fuerzas políticas, incluyendo con frecuencia a las de la oposición, para nombrar a cargos públicos. En general, se trata de buscar mecanismos institucionales para que se seleccionen empleados públicos cuya continuidad en el cargo dependa de su competencia o mérito y no de su lealtad política.
Es importante subrayar que el nivel de competencia de los empleados no es sinónimo de lo que tradicionalmente se interpreta como sistema de mérito en Costa Rica; es decir, unos funcionarios públicos seleccionados mediante oposiciones y con una plaza «en propiedad» de por vida, con independencia de su rendimiento. La evidencia empírica nos muestra que no es necesario tener una administración repleta de funcionarios para reducir la corrupción. Por ejemplo, los dos países menos corruptos del mundo en 2008, Suecia y Nueva Zelanda, eliminaron hace años el estatus funcionarial para la gran mayoría de sus empleados públicos, que en la actualidad se rigen por la misma legislación laboral que cualquier trabajador del sector privado.
¿Podemos aspirar en Costa Rica a unas administraciones más flexibles y eficientes y, a la vez, menos corruptas? El principal obstáculo para ello es que aquí el debate público está atrapado entre dos visiones antagónicas e indeseables ambas. Por un lado, los partidos políticos que, amparándose en la rigidez tradicional de la administración pública, han fomentado instituciones que permiten una alta politización de la administración y, por tanto, generan corrupción. Por otro, los representantes de los cuerpos de funcionarios que abogan por el mantenimiento de un sistema de empleados públicos inamovibles. Quien obviamente paga las ineficiencias derivadas de la politización y de la rigidez administrativa son los ciudadanos.
Aunque esta situación parezca irreversible, la experiencia de otros contextos debe infundirnos optimismo. Cuando activistas como Richard Childs- promotor de un tipo de gobierno local basado en directivos profesionales como los existentes en el sector privado- iniciaron su improbable lucha contra la politización y la corrupción que asolaban la mayoría de niveles administrativos en Estados Unidos, hace ya más de un siglo, se enfrentaron a redes clientelares cuyo poder parecía inexpugnable. Sin embargo, triunfaron porque fueron capaces de movilizar los intereses de aquellos que en última instancia generaban la riqueza del país, convenciéndolos de que ésta se estaba malgastando no con malas políticas públicas, sino con malos políticos, o mejor dicho, con la pervivencia de malas instituciones utilizadas por los políticos para sostener sus redes clientelares. ¿Podrá alguien en Costa Rica movilizar esos intereses? ¿Como hacemos si ya se han denunciado actos de corrupcion en municipios y la autoridad parece impavida ante tales denuncias? Empecemos por el principio…sigamos denunciando a los corruptos !!!

POR QUE DEBEMOS LUCHAR CONTRA LA CORRUPCION

Por MSC MAURICIO ALVARADO DELGADILLO

Se trata de una de las peores lacras sociales de la actualidad.-

Consiste en la realización de negocios en función de intercambios claramente reprobables, como es la venta de puestos públicos, el otorgamiento de impunidad, la venta de seguridad, el lavado de dinero, el encubrimiento de fraudes, el trafico de influencias, las concesiones a narcotraficantes, usureros y sinverguenzas, etc.-

El caso más simple y frecuente es la llamada “mordida”. El interesado proporciona una cantidad de dinero y el funcionario no ve la infracción cometida.-

En todos estos “negocios” una de las partes obtiene una cierta cantidad de dinero y la otra parte obtiene libertad para proseguir en sus actividades.-

La extorsión es la presión de una autoridad para obtener dinero a cambio de una promoción, recomendación o libertad para que la otra parte consiga sus objetivos ilícitos.-

El mal moral que envuelve la corrupción suele encubrirse con diversas falacias tales como la habilidad para imaginar y ejecutar grandes negocios, la facilidad para entablar contactos con personas importantes, políticos poderosos, artistas renombrados, la inteligencia visionaria que produce réditos, amistades, mercancías y demás beneficios.-

Un niño y un joven que vive inmerso en un ambiente de esta calaña suele perder el sentido de la honradez, de la moralidad y de la justicia, su modelo de conducta es súper valorado como ideal digno de ser imitado, digno de ser elogiado y de ser defendido “contra la calumnias moralizantes de personas incapaces, taradas, de escasa visión y de vida miserable” (el que no tranza no avanza).-

La educación moral en estas circunstancias se vuelve prácticamente imposible. La virtud de la honradez y de la justicia se convierte, en estas circunstancias, en una actitud tonta, indigna de una persona verdaderamente valiosa.-

Desde el punto de vista de la Ética es sumamente importante la colocación del valor del dinero y de las ganancias en negocios y demás producciones dentro del puesto que le corresponde. Colocar el valor de la justicia, la honradez y la verdad por encima del valor pecuniario es posiblemente la tarea más difícil que se puede lograr en el empeño de una autentica maduración humana.-

La función que cumplen el cine, la televisión y la literatura en la propagación de estas lacras es muy importante. Basta pintar a los personajes viciosos con características de héroe y el público queda atrapado dentro de esa axiología; juzga a dichos personajes con simpatía, con benevolencia y, en ocasiones, como verdaderos modelos para la vida personal. Esto no significa que toda novela, película o programa televisivo tenga que ser moralizante o tenga que “castigar al malo” al final de la trama.-

En este momento se requiere la acción educativa de parte de los padres de familia, los cuales pueden comentar, matizar y alabar o condenar los hechos y los personajes que se presentan en los medios masivos. Esto, sin embargo, no deja de ser un papel incómodo, a veces imposible, y en ocasiones, contradictorio en relación con las ideas y valores de los encargados de la educación familiar y escolar.-

La corrupción es un acto ilegal que ocurre cuando una persona abusa de su poder para obtener algún beneficio para sí mismo, para sus familiares o para sus amigos. Requiere de la participación de dos actores: uno que por su posición de poder pueda ofrecer algo valioso y otro que esté dispuesto a pagar un soborno para obtenerlo.-

Estos actos los observamos diariamente desde que abordamos cualquier transporte, en el mercado, al realizar trámites oficiales, etc.; puede suceder en los lugares menos pensados y con las personas menos esperadas.-

Aunque ilícita, hay quienes piensan que la corrupción puede ser útil. Argumentan que ayuda a esquivar las reglas excesivas, a acelerar los trámites y a ahorrar tiempo. Así, por ejemplo, dicen que sirve a los alumnos que tienen problemas con una materia para poder aprobarla, pues gracias a la corrupción pueden comprar al profesor. También dicen que sirve para establecer un criterio para determinar quiénes ingresan a las escuelas con mayor demanda. Sin embargo, los partidarios de este argumento no se dan cuenta de que en el largo plazo, la corrupción nos perjudica a todos. Por ejemplo, si en una escuela es común que los profesores acepten sobornos para aprobar a los alumnos, en el largo plazo la reputación de esa escuela se verá dañada. Esto terminará afectando a sus egresados, quienes cargarán para el resto de su vida con el sello de que vienen de una escuela que no los formó bien.-

La corrupción tiene consecuencias graves que afectan el desarrollo de los países. Algunos datos recientes muestran que el dinero que se gasta en corrupción deja de gastarse en los servicios públicos que proporciona el gobierno, tales como transporte público, electricidad, agua potable, etc. La corrupción, entonces, provoca que haya fallas en el suministro de agua, baja calidad de los servicios médicos, baja calidad de los servicios educativos, fallas en la infraestructura vial y aumento en la incidencia de cortes eléctricos, por mencionar algunos ejemplos. Además, la corrupción puede terminar poniendo en riesgo la vida e integridad física de los ciudadanos. Por ejemplo, la baja calidad de los servicios médicos puede costarle la vida a un ciudadano enfermo. La construcción de edificios que no cumplen con los mínimos requisitos de seguridad, pueden costarle la vida a un ciudadano durante un temblor.-

La malas carreteras y puentes pueden ser muy peligrosas para los conductores de camiones y sus pasajeros, etc.-

Por último, la corrupción rompe el tejido social pues disminuye la confianza de los ciudadanos en las instituciones, el gobierno y entre ellos mismos. También afecta el nivel ético de la sociedad en su conjunto. En la medida en que la corrupción se generaliza, los escrúpulos éticos se van perdiendo.-

Hoy un agradecimiento, a un año de haber empezado tribuna contra la corrupcion y l@s corrupt@s. Hemos llamando a la accion a ciudadan@s honest@s que amamos este pais y a quienes inclusive hemos sido victimas de este tipo de lacras, que actuan de multiples maneras para obtener sus beneficios.-

Sentimos agrado en la actitud de much@s, que han enviado informacion importante de actos de corrupcion y a los que han reenviado los correos por todo el pais (mas de cuatro mil contactos reciben nuestra informacion), apoyando el trabajo de denuncia constante, pues la lucha contra la corrupcion es de todos los dias.-

Nuestra actividad ya ha generado reaccion, pero algunos corruptos siguen alli, sentados en sus sillas, esperando aumentar sus beneficios espurios, asi como las proximas elecciones.-

No mas corrupcion…alto a la impunidad !!!

Atento

Msc. MAURICIO ALVARADO DELGADILLO
ABOGADO Y NOTARIO 7532
CELULAR 88 71 98 48 / TELFAX 22 78 11 00
TRES RIOS-CARTAGO/AMERICA CENTRAL-

DENUNCIAS CONTRA CONTRALORIA GENERAL

Nuevamente el licenciado Mauricio Alvarado Delgadillo, denunicia la supuesta corrupción en la Municipalidad de Golfito con la aparente complicidad de la Contraloría General de la República.

Nuevamente el Alcalde de Golfito Jimmy Cubillo Mora burla la legislacion, en este caso la Ley de Presupuesto y el Reglamento de la Contraloria General de la Republica, con relacion a los limites de presentacion de presupuestos.-
 
La Contraloría fija hasta el 30 de setiembre de cada año para recibir y tramitar presupuestos, sin embargo «extrañamente» al alcade de Golfito, le aprobaron el presupuesto después del tiempo reglamentado, así se hizo el año  pasado y de igual manera lo estan haciendo este año, pues en esta semana le recibieron nuevamente un presupuesto para su tramitación.-

 La funcionaria que se presto para esta anomalia en la CGR es la Licenciada HELLEN LAVERDE, quien trabaja en presupuestos municipales y a quien he llamado personalmente, negandose a atenderme, lo cual me preocupa verdaderamente, pues no quisiera pensar mal.-
 
Lo extraño de esto es que los analistas del ente contralor saben PERFECTAMENTE que un presupuesto finalizando el año es imposible ejecutarlo, no alcanza el tiempo necesario para cumplir con el bloque de legalidad para contratar las diferentes obras, pero en este caso Jimmy se brinca todas las normas….¿y la Contraloria? Bien gracias !!! 

Por otro lado, se tienen (uno ya lo «ejecutaron» supuestamente) dos creditos millonarios (que pagan tod@s los golfiteños ciudadanos de este gran pais), con el Banco Nacional de Costa Rica, para proyectos de infraestructura vial. En caso del primer proyecto, el analisis de calidad de obra por parte de la Contraloria es nula y en el que falta, las cosas parece, van por el mismo camino.

 Un endeudamiento necesario? Quienes pagaran las consecuencias si no hay control de obra? Logicamente tod@s nosotr@s….!!!
 
Estoy trasladando esta informacion a la Jefatura del Departamento de Presupuesto de la Contraloria General de la Republica, porque en este caso SOBRAN LAS PREGUNTAS Y ESTAMOS AYUNOS DE RESPUESTAS. Doña Hellen Laverde debe una explicacion…ire hasta las ultimas consecuencias.-

 No mas corrupcion…no mas impunidad !!!!